

Aunque uno de cada cuatro españoles asegura comer pan de masa madre, el 40% no sabe realmente qué es, y uno de cada cuatro no puede mencionar ningún beneficio asociado a ella. Solo un 27% la vincula con la salud, y un 26% con su carácter natural. Este vacío informativo revela una brecha entre el marketing y la educación alimentaria, en un sector donde los mensajes comerciales pesan más que la información nutricional. En definitiva, la masa madre se ha convertido más en un reclamo de mercado que en un valor comprendido, reflejando cómo el consumidor español sigue guiándose más por la etiqueta que por el conocimiento.


Aunque uno de cada cuatro españoles asegura comer pan de masa madre, el 40% no sabe realmente qué es, y uno de cada cuatro no puede mencionar ningún beneficio asociado a ella. Solo un 27% la vincula con la salud, y un 26% con su carácter natural. Este vacío informativo revela una brecha entre el marketing y la educación alimentaria, en un sector donde los mensajes comerciales pesan más que la información nutricional. En definitiva, la masa madre se ha convertido más en un reclamo de mercado que en un valor comprendido, reflejando cómo el consumidor español sigue guiándose más por la etiqueta que por el conocimiento.