Desde FIAB recuerdan que el agua es un recurso clave para la industria de alimentación y bebidas, que lleva años optimizando y reduciendo su consumo en todos los procesos sin comprometer las exigencias de higiene o seguridad alimentaria y que es indispensable para garantizar el abastecimiento y evitar la escasez de determinados productos.
"Es imprescindible que la industria de alimentación y bebidas reciba un tratamiento especial en estas circunstancias tan graves y que tenga un acceso preferente al agua para poder garantizar un suministro estable y seguro de alimentos y bebidas", afirma Mauricio García de Quevedo, director general de FIAB.
FIAB también señala la importancia de desarrollar un Plan Hidrológico que contemple nuevas interconexiones y trasvases entre cuencas, así como de planes de inversión en ampliaciones, desarrollo y modernización de infraestructuras de almacenamiento de agua y de riego.
Asimismo, desde la industria elaboradora de alimentos y bebidas se solicita el impulso del uso de los recursos no convencionales de agua, como la reutilización y la desalación, indispensables para mitigar los efectos del cambio climático y destacan que la reutilización de agua regenerada es clave para alcanzar la seguridad hídrica en nuestro país.
Desde FIAB recuerdan que el agua es un recurso clave para la industria de alimentación y bebidas, que lleva años optimizando y reduciendo su consumo en todos los procesos sin comprometer las exigencias de higiene o seguridad alimentaria y que es indispensable para garantizar el abastecimiento y evitar la escasez de determinados productos.
"Es imprescindible que la industria de alimentación y bebidas reciba un tratamiento especial en estas circunstancias tan graves y que tenga un acceso preferente al agua para poder garantizar un suministro estable y seguro de alimentos y bebidas", afirma Mauricio García de Quevedo, director general de FIAB.
FIAB también señala la importancia de desarrollar un Plan Hidrológico que contemple nuevas interconexiones y trasvases entre cuencas, así como de planes de inversión en ampliaciones, desarrollo y modernización de infraestructuras de almacenamiento de agua y de riego.
Asimismo, desde la industria elaboradora de alimentos y bebidas se solicita el impulso del uso de los recursos no convencionales de agua, como la reutilización y la desalación, indispensables para mitigar los efectos del cambio climático y destacan que la reutilización de agua regenerada es clave para alcanzar la seguridad hídrica en nuestro país.