El sector español de alimentos, bebidas y tabaco vuelve a mostrar una evolución desigual. En septiembre, las exportaciones crecieron apenas un 2,4%, hasta 5.546,3 millones de euros, mientras que las importaciones se dispararon un 12,6% y alcanzaron los 4.795 millones. El saldo comercial se estrecha así hasta 751,3 millones, muy por debajo de los 1.156,9 millones del año anterior.

En el acumulado de enero a septiembre, las exportaciones ascienden a 56.132,2 millones de euros, un 4,8% más, frente a unas importaciones que suben un 8,2%, hasta 42.835,3 millones. Aunque el sector mantiene un superávit de 13.296,9 millones, éste ya es inferior al registrado en 2024.

La tendencia revela un problema estructural: crecemos, pero a menor ritmo que lo que compramos. Un desequilibrio que reduce el margen económico del sector y evidencia la falta de estrategias que refuercen su competitividad en un mercado global cada vez más exigente.

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