Los efectos que la sequÍa está teniendo en el sector ganadero andaluz y la inflación al alza por la guerra en Ucrania ha hecho que la Junta de Andalucía convoque ayudas por un total de 7 millones de euros.

La falta de disponibilidad de pastos en cantidad y calidad suficientes se une a la dificultad de garantizar el suministro de agua a los animales. Esto obliga a los ganaderos a tener que comprar el agua y transportarla hasta la explotación o tener que construir instalaciones de almacenamiento. En concreto, esta línea de ayudas apoya al sector bovino con un importe de más de 2,3 millones de euros mientras que el ovino recibirá casi 1,8 millones de euros y, por último, el caprino con 900.000 euros.