

La tienda física recupera protagonismo: el 64% asegura ahorrar más acudiendo al establecimiento, diez puntos más que en 2024. Los hogares concentran su gasto en cestas más pequeñas, con presupuestos semanales que en el 85% de los casos no superan los 100 euros.
El precio se consolida como el factor decisivo para siete de cada diez consumidores, muy por encima de la proximidad o la atención al cliente. Además, las marcas propias ganan terreno, con un 59% que las considera clave para reducir entre un 10 y un 25% su gasto anual.
Los datos muestran un patrón claro: la distribución debe adaptarse a un cliente que exige descuentos tangibles, fidelización efectiva y productos de marca propia competitivos, en un escenario donde el ahorro manda y la planificación queda en segundo plano.


La tienda física recupera protagonismo: el 64% asegura ahorrar más acudiendo al establecimiento, diez puntos más que en 2024. Los hogares concentran su gasto en cestas más pequeñas, con presupuestos semanales que en el 85% de los casos no superan los 100 euros.
El precio se consolida como el factor decisivo para siete de cada diez consumidores, muy por encima de la proximidad o la atención al cliente. Además, las marcas propias ganan terreno, con un 59% que las considera clave para reducir entre un 10 y un 25% su gasto anual.
Los datos muestran un patrón claro: la distribución debe adaptarse a un cliente que exige descuentos tangibles, fidelización efectiva y productos de marca propia competitivos, en un escenario donde el ahorro manda y la planificación queda en segundo plano.