El vino español resiste en volumen, pero gana terreno en valor. Según los últimos datos de la OIVE, el consumo aparente cayó un 0,7% interanual a mayo de 2025, hasta los 9,76 millones de hectolitros, una pérdida de 68.640 hectolitros.

Sin embargo, las ventas en valor aumentaron un 2,3%, alcanzando los 3.270 millones de euros gracias a un precio medio de 5,15 euros por litro, un 2,9% más que en 2024. En canales de alimentación y hostelería, el volumen cayó un 0,6%, mientras que otras vías como vinotecas, e-commerce o autoconsumo, sumaron 3,41 millones de hectolitros, aunque con una ligera caída del 0,9%.

A pesar de las oscilaciones mensuales —con picos como abril (+4,7%) y caídas como febrero (-20%)— el sector se estabiliza tras años marcados por la inflación. El mercado se adapta, priorizando valor frente a volumen.

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