En los alimentos básicos, las subidas son superiores al 40%. En concreto, el aceite de girasol es ahora un 118% más caro que hace un año, el aceite de oliva un 53% y la harina cuesta un 50% más ahora que en mayo de 2021.

Los productos envasados han subido más que los frescos. La subida media de los productos de marca blanca o de fabricantes se acerca al 20%. En los productos frescos, las carnes han subido por encima de la media, el pollo un 16,1%, el vacuno 17,8% o el cordero un 18%. Hacer la compra cuesta al consumidor 830 euros más al año.