

Su actividad genera 11.600 millones en valor añadido bruto, el 0,8% del PIB, y 206.000 empleos, de los cuales más de 70.000 son directos. Con 148 centros de producción, el 75% en municipios de menos de 30.000 habitantes, el sector combina arraigo local y proyección internacional, con exportaciones que crecieron un 19% hasta los 579 millones.
La industria refuerza además su compromiso ambiental: ha reducido un 26% el consumo de agua desde 2010 y alcanza un 60% de plástico reciclado en sus envases, muy por encima del estándar europeo.
Un sector que demuestra que la rentabilidad y la sostenibilidad pueden ir de la mano, pero que aún debe enfrentar el reto de mantener su crecimiento sin depender tanto del turismo y del consumo estacional.


Su actividad genera 11.600 millones en valor añadido bruto, el 0,8% del PIB, y 206.000 empleos, de los cuales más de 70.000 son directos. Con 148 centros de producción, el 75% en municipios de menos de 30.000 habitantes, el sector combina arraigo local y proyección internacional, con exportaciones que crecieron un 19% hasta los 579 millones.
La industria refuerza además su compromiso ambiental: ha reducido un 26% el consumo de agua desde 2010 y alcanza un 60% de plástico reciclado en sus envases, muy por encima del estándar europeo.
Un sector que demuestra que la rentabilidad y la sostenibilidad pueden ir de la mano, pero que aún debe enfrentar el reto de mantener su crecimiento sin depender tanto del turismo y del consumo estacional.