El tomate es la hortaliza más consumida del mundo y en España supone ya el 24% del consumo doméstico, con una media de 12 kilos por persona al año. En 2024, el consumo creció un 6,2%, reflejo de su papel central en la dieta y de la diversificación varietal.

Pero el dato clave está en la producción y el comercio exterior: con 20.800 hectáreas cultivadas y 1,6 millones de toneladas, España exporta 675.000 toneladas por un valor de 1.100 millones de euros, principalmente a Alemania, Francia y Reino Unido. Una orientación exportadora que sostiene al sector, pero que lo hace vulnerable a la presión de precios internacionales y al incremento de costes internos, que amenazan la rentabilidad del agricultor.

Mientras tanto, el tomate será el producto estrella de Fruit Attraction 2025, escaparate que refleja la fuerza del sector, aunque detrás de esa imagen se esconde una realidad cada vez más exigente: se vende más volumen, pero con márgenes cada vez más ajustados.

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