La evolución de las condiciones climáticas de forma atípica está condicionando los rendimientos de los cultivos de patata en toda España, además de afectar la calidad de la cosecha.

Según los datos facilitados por el Ministerio de Agricultura el pasado año 2022 se produjeron 1.934.000 toneladas de patata, una reducción del 7% respecto a la campaña 2021, cayendo en los últimos 10 años un 12,4%. Por comunidades, sólo Galicia experimento un crecimiento en su cosecha, debido fundamentalmente al incremento en la superficie que alcanzó un 15,7%. Para 2023 los ciclos de patata extratemprana, temprana y de media estación, experimentan una reducción de superficie conjunta del 3,3%, sin contar con los datos de la patata tardía. Las estimaciones del Ministerio de producción en 2023 muestran incrementos en patata extratemprana de un 6,1% y para la patata temprana el aumento es muy similar al pasado 2021 con el 0,5% más.