Las consecuencias de la guerra de Ucrania están teniendo un impacto en la estrategia de la Unión Europea. Los 27 y las instituciones comunitarias analizas los efectos colaterales del conflicto y la necesidad de armar un cambio en el rumbo de las políticas agrícolas para garantizar la oferta alimentaria.

Si el abastecimiento de alimentos está asegurado en los países de la Unión Europea, el alza de precio puede afectar a la capacidad de los ciudadanos para comprar comida en condiciones asequibles. Para las organizaciones agrarias, la estrategia geopolítica agrícola de la Unión Europea ha quedado en tela de juicio.

Los ejemplos en los cambios de rumbo se observan en la autorización de la Unión Europea para la siembra en barbechos durante esta campaña, con el fin de paliar la reducción de cosechas ucranianas debido al conflicto bélico provocado por la invasión rusa de Ucrania. Un estudio del Parlamento Europeo revela que la agricultura comunitaria tiende a concentrarse en grandes empresas y el número de explotaciones, 10 millones en toda la Unión Europea, podría reducirse un 62% en 2040.