En Valencia, el sector del arroz y las organizaciones agrarias estallan contra el proyecto de texto que la Comisión Europea prevé presentar en la próxima reunión del Comité Permanente de Plantas, Animales, Alimentos y Piensos por la cual pretende aumentar de 0,01 a 0,09 mg/kg la tolerancia de importación del Triciclazol, a pesar de tratarse de una sustancia cuyo uso está prohibido para los agricultores de la Unión Europea.

Una propuesta incoherente según los agricultores que persigue favorecer la entrada de más cargamentos de arroz procedentes de Asia, especialmente de la India.
El Triciclazol es esencial para el control de la principal enfermedad del cultivo del arroz, pyricularia oryzae. Desde su prohibición, los arroceros valencianos solo disponen de dos sustancias autorizadas, de manera que la pyricularia ya ha generado importantes resistencias: solo en la variedad bomba, el último año provocó una merma del 50% de la producción. Las importaciones de arroz a la UE se han incrementado un 40% en el último año comercial.