La crisis económica y social que ha desatado el encarecimiento del precio del combustible impacta, también, en consumidores y las pymes que gestionan las estaciones de servicio.

De las 11.500 estaciones de servicio existentes en España, 3.500 están en manos de CEPSA, REPSOL y BP. El resto son gestionadas por Pequeñas y Medianas Empresas que presentan dificultades para hacer frente a la bonificación de 20 cts por litro decretada por el Gobierno de España y apoyada por el Confederación Española de Empresarios de Estaciones de Servicio que, sin embargo, recriminan al ejecutivo que su falta de diálogo con el sector podrá en peligro la viabilidad de las pequeñas empresas por sus dificultades para adelantar la bonificación. Hacienda y Patronal abrirán un periodo de diálogo.