La norma actualiza los aspectos que se consideran fundamentales para garantizar la seguridad de las aguas envasadas destinadas al consumo humano e incorpora nuevos indicadores y límites máximos en sustancias químicas a las establecidas con anterioridad. Es el caso de los compuestos con propiedades de alteración de la endocrina, los productos farmaceúticos o los microplásticos.
La norma actualiza los aspectos que se consideran fundamentales para garantizar la seguridad de las aguas envasadas destinadas al consumo humano e incorpora nuevos indicadores y límites máximos en sustancias químicas a las establecidas con anterioridad. Es el caso de los compuestos con propiedades de alteración de la endocrina, los productos farmaceúticos o los microplásticos.