El negocio mundial del plástico está en manos de siete países que marcan las reglas y protegen sus intereses: China, con el 34 % de la producción, y Estados Unidos, con el 13 %, lideran un mercado dominado por corporaciones como Sinopec, ExxonMobil, LyondellBasell y Saudi Aramco.

En 2023, los 15 mayores productores recibieron 26.400 millones de dólares en subsidios para mantener barato el petróleo y sus derivados. Tres países —China, Arabia Saudí y Alemania— acapararon el 80 % de estas ayudas, financiando un modelo que beneficia a unos pocos y reparte los costes medioambientales y sanitarios entre todos.

Hoy producimos 460 millones de toneladas al año, la mitad en plásticos de un solo uso, y reciclamos menos del 10 %. Sin freno, en 2060 el consumo se triplicará. La industria gana, los gobiernos pagan… y el planeta pierde.

‍