El 68% se considera proactivo en el cuidado de su salud, y el 61% da ahora más prioridad a envejecer bien que hace cinco años. Además, el 48% está dispuesto a gastar entre 88 y 440 euros al mes en bienestar físico y mental, autocuidado y nutrición.
Pese a ello, un 82% reclama etiquetas más claras y un 22% admite que su falta de confianza en productos de salud les frena. La salud se ha convertido en una decisión económica estratégica y un criterio de compra prioritario.
El 68% se considera proactivo en el cuidado de su salud, y el 61% da ahora más prioridad a envejecer bien que hace cinco años. Además, el 48% está dispuesto a gastar entre 88 y 440 euros al mes en bienestar físico y mental, autocuidado y nutrición.
Pese a ello, un 82% reclama etiquetas más claras y un 22% admite que su falta de confianza en productos de salud les frena. La salud se ha convertido en una decisión económica estratégica y un criterio de compra prioritario.