La nueva Estrategia en Salud Cardiovascular del sistema sanitario español, que aprobará el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, busca mejorar la salud del corazón de los españoles, mediante políticas fiscales, concienciación social y refuerzos en la atención primaria. El gobierno de España quiere limitar, que no prohibir, el consumo de alcohol en la carta de los restaurantes y que ofrezcan por defecto agua en los menús.

Otro de los fines de la estrategia es limitar las bebidas con alcohol en las cafeterías y máquinas expendedoras de centros laborales de la Administración Pública y todo tipo de centros educativos, públicos y privados. Es más, colaborar con establecimientos de restauración para promover la dieta mediterránea como modelo de alimentación cardiosaludable, sin incluir en ella el consumo de alcohol, aparece también entre las dieciséis acciones específicas de la estrategia para mejorar la salud cardiovascular en España mediante la creación de estilos de vidas y entornos saludables.