A pesar de ser un destino consolidado, el Brexit ha introducido nuevas trabas como declaraciones aduaneras y certificados de conformidad, que afectan al sector.
España mantiene su liderazgo como principal proveedor, con una cuota del 27%, frente al 10,5% de Países Bajos. Sin embargo, la presión de países terceros como Marruecos, Sudáfrica o Perú se intensifica: su cuota de mercado ha crecido un 73% en cinco años y ya iguala a la española.
La obligatoriedad del certificado fitosanitario, prevista para 2025, ha sido pospuesta hasta enero de 2027, abriendo un periodo clave de negociación entre Reino Unido y la UE. El futuro del comercio agroalimentario se juega ahora en el equilibrio entre competitividad, regulación y alianzas.
A pesar de ser un destino consolidado, el Brexit ha introducido nuevas trabas como declaraciones aduaneras y certificados de conformidad, que afectan al sector.
España mantiene su liderazgo como principal proveedor, con una cuota del 27%, frente al 10,5% de Países Bajos. Sin embargo, la presión de países terceros como Marruecos, Sudáfrica o Perú se intensifica: su cuota de mercado ha crecido un 73% en cinco años y ya iguala a la española.
La obligatoriedad del certificado fitosanitario, prevista para 2025, ha sido pospuesta hasta enero de 2027, abriendo un periodo clave de negociación entre Reino Unido y la UE. El futuro del comercio agroalimentario se juega ahora en el equilibrio entre competitividad, regulación y alianzas.